Para el buen funcionamiento del motor de tu vehículo existen líquidos que debes proporcionarle. Conoce los tipos de lubricantes para autos que existen y sus principales componentes.
El aceite de motor es el encargado de lubricar y mantener refrigerados los elementos que intervienen en la combustión y funcionamiento del motor. En el mercado existen varios tipos de lubricantes para autos, por lo que es importante que conozcas cuál es el indicado para tu vehículo
Tipos de lubricantes para autos: ¿cuál debes usar?
Puede que te preguntes por qué existen varios tipos de lubricantes para autos. La razón estriba en que los requerimientos de un motor diésel, un motor a gasolina de última generación o uno que ha superado los 300.000 kilómetros, por ejemplo, son diferentes entre sí.
De ahí que los fabricantes de aceites se esfuerzan por integrar a sus productos los componentes apropiados para cada motor, por lo que las categorías de aceite se clasifican según su constitución y el uso a la cual será destinado.
1. Aceite de motor sintético
Es el resultado de un trabajo excepcional de ingeniería química. El aceite de motor sintético está compuesto por una gran cantidad de químicos artificiales -aditivos de gran rendimiento-, propiedades uniformes y un nivel bajo de impurezas (en comparación con los aceites convencionales).
Lo anterior, le permite tener un excelente desempeño sin importar la temperatura y aumentar la potencia del motor, entre otras ventajas.
2. Aceite de motor semi-sintético
Como su nombre lo indica, el aceite de motor semi-sintético integra una mezcla: componentes de aceites sintéticos y convencionales. Ofrece excelentes condiciones para bajas temperaturas y una notable resistencia a la oxidación.
3. Aceite de motor convencional
Los aceites convencionales, comúnmente llamados “minerales” poseen un amplio abanico de grados, viscosidad y nivel de calidad. Sin embargo, su uso es recomendable si tu auto tiene una mecánica sencilla y no lo expones a condiciones severas de manejo.
4. Aceite de motor de alto kilometraje
Son especialmente diseñados para vehículos antiguos o que cuentan con un kilometraje superior a los 120.000 kilómetros. Su constitución, que integra aditivos especiales, evita el rápido quemado de aceite y la permanencia de fugas en el motor.
Cómo lubricar el chasis de un auto
Lavar tu vehículo de forma habitual y limpiar el motor de un auto por dentro ayudará a remover las partículas de polvo que pueden dañar la pintura y sus componentes, además de contribuir a que permanezca reluciente.
No obstante, saber cómo lubricar el chasis de un auto y su motor puede contribuir a alargar la vida útil de los componentes internos de tu automóvil. Popularmente las personas creen que el chasis debe ser engrasado. Sin embargo, son las piezas que se encuentran debajo de su ubicación las que lo necesitan en algunos casos.
¿En qué consiste la lubricación y engrasado de las piezas?
Aunque la mayoría de los vehículos actualmente cuentan con componentes lubricados, una alta frecuencia de uso representa la posibilidad que se acumulen por debajo del chasis elementos altamente corrosivos.
Por ello, resulta un buen mecanismo de prevención el que puedas entregarle un engrasado y lubricación extra cada dos años. Cuando llevas tu automóvil para solicitar este servicio, es común que se limpie el motor ocupando aire a presión para remover la grasa y exceso de polvo de su interior, sin que se produzcan daños a los componentes eléctricos.
No te olvides de los sistemas de suspensión, los cuales requieren de un lubricante y engrasado especial que prolongue su vida útil y asegure un óptimo desempeño con altas temperaturas.
Ocupar el aceite adecuado -que normalmente está señalado en el manual de fábrica- y engrasar y lubricar los elementos internos de tu auto son acciones que te evitaran más de un dolor de cabeza. No dudes en asesorarte con expertos mecánicos si tienes dudas. Recuerda que en lo relativo a la conducción, la prevención debe ser tu filosofía.